Ante la OPA lanzada por BBVA sobre Banco Sabadell, la Asociación de Accionistas Minoritarios de Banco Sabadell quiere recordar un hecho de máxima relevancia: BBVA sigue imputado en la Audiencia Nacional por el caso Villarejo, una de las tramas más graves de espionaje y corrupción empresarial de las últimas décadas en España.
La entidad está siendo investigada por presuntos delitos de cohecho, descubrimiento y revelación de secretos y corrupción entre particulares, relacionados con la contratación de los servicios del excomisario José Manuel Villarejo para espiar a empresarios, periodistas y competidores.
Resulta ineludible cuestionarse si es responsable aceptar cambiar las acciones de Banco Sabadell por títulos de una entidad que arrastra una causa judicial de esta magnitud, con un proceso que podría derivar en consecuencias económicas y reputacionales muy graves para BBVA y, por extensión, para sus accionistas. De hecho, todo apunta a que el juicio se celebrará en el año 2026.
El negocio en México y Turquía, otro riesgo añadido
A esta situación judicial se suma la fuerte exposición de BBVA a mercados inestables, como México y Turquía:
- En México, BBVA ha registrado una caída del margen de intereses, las comisiones, el margen bruto y, en consecuencia, de su resultado atribuido (-7,6%). Este deterioro refleja un entorno económico y regulatorio cada vez más complicado.
- Las políticas arancelarias impulsadas por la administración Trump siguen afectando negativamente a la economía mexicana, añadiendo nuevas tensiones a un mercado crucial para BBVA.
- Además, Turquía, donde BBVA también mantiene una presencia significativa, se enfrenta a una inestabilidad política y financiera persistente, con fuertes vaivenes en su moneda, inflación descontrolada y un entorno regulador impredecible.
Esta elevada dependencia de mercados de alto riesgo puede traducirse en una destrucción de valor para los accionistas de BBVA a medio y largo plazo.
La última palabra la tienen los accionistas
Es importante recordar que la decisión final recae en los accionistas del Banco Sabadell. Somos nosotros quienes, con nuestro voto, decidiremos si aceptamos o rechazamos la oferta.
Por ello, desde la Asociación de Accionistas Minoritarios de Banco Sabadell hacemos un llamamiento a todos los accionistas para que analicen detenidamente los riesgos asociados a esta operación. Cambiar acciones de Banco Sabadell por las de una entidad imputada, con una alta exposición a mercados inestables, no parece ser una decisión alineada con los intereses de los accionistas.